Los puentes grúa
están compuestos por una viga (que puede ser simple o doble) que va desplazándose
a lo largo de unos raíles apoyados generalmente en columnas. De esta manera, el
puente y el polipasto se van moviendo por los raíles para trasladar los objetos
de un lugar a otro. El movimiento es longitudinal, y en casi todos los casos es
posible gracias a unas ruedas metálicas situadas en las guías, también de
metal.
Los desplazamientos
que un puente grúa puede realizar son de elevación y descenso. Los pasos
básicos que se siguen para transportar los objetos son:
1) Se coge la carga con el gancho y
la ayuda de un cable principal.
2) Se orienta el material al lugar al
que queramos moverla.
3) Se traslada el carro por el puente
y las vías hacia el sentido elegido.
4) Baja la carga allí donde se
indique.
En caso de que no
se disponga del espacio suficiente como para poder instalar unas columnas o
vigas, es posible colocar los raíles por los que se desplazará el puente grúa
en las paredes de la nave, siempre y cuando también lo permitan. De esta
manera, será mayor el aprovecho del espacio.
Como se trata de
una herramienta algo compleja y que soporta grandes cargas, es necesario
tenerla siempre en buen estado y hacerle revisiones periódicas para asegurarnos
de que todo sigue correctamente. Por eso, desde Asisteel le ofrecemos un
servicio de mantenimiento de puentes
grúa en Aragón, dentro del cual aportamos informes y evaluaciones
relacionados con los sistemas de seguridad requeridos. En caso de necesitarlo,
además, también le damos la posibilidad de reparar y reformar estas
herramientas, pues queremos cubrir en la totalidad todos los aspectos
relacionados con ellas para garantizar su correcto funcionamiento y, sobre
todo, la mayor seguridad posible.
Puede informarse de
nuestro servicio de mantenimiento de
puentes grúa en Aragón en nuestra página web o en el número de teléfono 976
572 384.